Trauma Psicológico

Es una consecuencia debilitante que las personas sufren luego de haber sufrido una experiencia abrumadora, excesiva o como una amenaza para su vida o de las personas que ama. Imagina que vas caminando por la calle y de forma intempestiva sufres un asalto. Esta experiencia puede constituir un trauma psicológico muy fuerte porque es un alto impacto emocional (peligro), vivido en soledad (sin la protección de la familia). Los traumas pueden ser vivencias emocionales muy graves o aparentemente muy sencillos pero percibidos por la víctima o la persona como un gran peligro. Por ejemplo, una enfermedad, un accidente, la pérdida de un ser querido, un asalto, una caída, despido inesperado del trabajo, un cambio de domicilio a un lugar desconocido, y varias situaciones que la persona no puede procesar, es algo que lo desborda. En estos casos, el trauma se instala en la vida afectando su desempeño personal, laboral, familiar, social; lo que limita que pueda llevar una vida armoniosa.
Cuando tenemos situaciones que desbordan la capacidad para resolverlas por nosotros mismos, podemos considerarlo como un indicador que necesitamos ayuda profesional para procesar y superar el trauma psicológico.